
Fuente: https://www.flickr.com/photos/aurimas_m/3467632119/in/photostream/
Sin modificaciones
En ocasiones me sorprende, y mucho, el comportamiento humano. Casi diariamente vemos en las noticias imágenes de personas fallecidas en atentados o tiroteos y no nos escandalizamos. O emiten una película porno y no nos hacemos cruces diciendo: «¡Oh, Dios mío!». Bueno, o quizá sí, pero otros motivos, jajajaja…
Sin embargo, hace unos días, leyendo un post de Así piensa una mamá titulado «#mamanoteescondas«, parece que hay cierto tipo de personas (?) a las que ver en la calle o en un lugar público algo tan natural como una madre amamantando a su hijo hace que se les caigan los palos del sombrajo, como se suele decir. Y yo me pregunto, ¿por qué? ¿Por el hecho de ver una teta, quizá? ¿Acaso no vemos tetas a diario en la misma tele? ¡Ah, claro! Las tetas de la tele son perfectas, estupendas, redonditas y respingonas, la antítesis de las tetas de la calle, las de las mujeres reales.
¿O será porque esos o esas que lanzan miradas reprobatorias a una mujer y su hijo, que disfrutan en ese momento de la lactancia, son robots con apariencia humana, a lo Terminator, y no comen? Sí, os prometo que hay gente que puede tirarse hasta nueve horas sentada en una silla sin probar bocado. Lo sé porque he coincidido con muchas en mi vida laboral. 😉
O, sencillamente, no tienen corazón, no son humanos. Si no, ¿cómo te explicas que una persona pueda mirar con desprecio a un bebé que mama del pecho de su madre? ¿Acaso hay algo más bonito que esa conexión entre madre e hijo, ya sea con una teta de por medio, una mirada, un abrazo, un beso, una sonrisa?
Hoy quiero sumarme a la iniciativa #mamánotescondas, creada y promovida por los blogs Misión: Mamá Ninja, Un papá como Darth Vader, #papanoara: papá de seis y La parejita de golpe. Si quieres apoyarla, puedes escribir tu propio post y/o difundir el hashtag en las redes.
Porque cada mujer tiene el derecho de amamantar a su hijo donde le dé la gana, sin que nadie pueda dedicarle ni una mirada, ni una palabra. Mamá, no te escondas.
¿Sabéis qué es lo mejor de escribir este post? Que he repetido tanto la palabra teta que me van a llover las visitas, ¡jajaja!. Aunque creo que mi blog no va a poder satisfacer esas búsquedas 😉
Tienes toda la razón. La gente se harta de ver a los el gran hermano todos con todos y les espanta ver como mama un bebé. Qué triste…
Me gustaLe gusta a 2 personas
Pues sí. Gran Hermano… Recuerdo que solo vi la primera edición. Supongo que la cosa habrá empeorado muchísimo. 😉
Me gustaLe gusta a 1 persona
Yo soy partidaria del «no me escondo pero tampoco lo anuncio».Es decir, con nuestros dos años y medio, mi hijo sigue a teta y generalmente ya solo de noche pero a veces pide en la calle y yo le doy.Eso si, discretamente,sin llamar la atención,pero también sin esconderme, que no hago nada malo 😉
Me gustaMe gusta
Sí, cada una tiene que buscar el lugar donde se sienta cómoda.
Me gustaMe gusta
Mas que lugar,la forma diría yo porque a mi me tocó darle en su propio bautizo y no se dio cuenta ni el cura jaja.
Me gustaMe gusta
Y la forma también. Pero sin escondernos. Porque como dices, no hacemos nada malo. 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
Nos hemos cruzado!
Me gustaMe gusta
Sí, ¡jaja! ¡Se me fue el dedo!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Me parece muy bien. Yo aún no se como me adaptaré pero creo que soy de las de «no me escondo pero tampoco lo anuncio» ya que soy bastante vergonzosa.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Yo también lo era. Siempre he sido muy pudorosa para enseñar ciertas partes de mi cuerpo. Pero aprendí a pasar de ello y dije: si tengo que enseñar el pecho para que mi hija coma, pues a por todas. 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
Yo he amamantado a mis hijas en público muchas veces: en el parque, en la piscina, en un bar, en la playa… A veces, toca comer y si una mami tira de biberón y nadie dice nada, tampoco tendría nadie que molestarse si yo saco la teta. Pero la gente se molesta. He aguantado miradas de todo tipo y frasecitas murmuradas en voz lo suficientemente alta para que todos la oyeran, pero he pasado y he seguido a lo mio. Sin hacer aspavientos, con discreción y, según en qué sitio, tapándome con un pañuelo o similar… No hay nada más natural y poco erótico que una madre dando el pecho a su hijo. Ale. Ya está.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Madre mía, no quiero ni imaginarme que alguien me lance una mirada o un comentario porque me transformaría en el Increíble Hulk, ¡jaja!
Un abrazo y gracias por comentar. 🙂
Me gustaMe gusta
Estoy contigo, nosotros después de tres años seguimos sin escondernos. Me encanta la iniciativa, a ver si tengo tiempony me uno.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Tres años, ¡genial! 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
a mi me hierve la sangre de escuchar a algunas personas hacer comentarios ofendidos porque ven a una mujer amamantando, para mi son personas que sexualizan el acto mas hermoso y natural que existe entre madre e hijo, porque la verdad no se me ocurre ninguna otra razon. Ojala estas personas cambien su forma de pensar Algun dia, o mejor, las nuevas generaciones no pienses de esta manera
Me gustaLe gusta a 1 persona
Eso espero. 😉
Me gustaMe gusta